Los guio con seguridad, de modo que no tuvieran temor; y el mar cubrió a sus enemigos. (Salmos 78:53)
Nada puede detener la fuerza de la poderosa presión del agua.
Menos de metro y medio de agua puede levantar un carro que pesa miles de libras y moverlo a su antojo.
Probablemente ha visto en las noticias reportes donde casas enteras son arrastradas durante una enorme inundación o ciudades por un maremoto.
De la misma forma, usted puede tener obstáculos que parecen insuperables o sueños que parecen inalcanzables, pero permítame animarlo: cuando Dios libera un torrente de su poder, nada podrá detenerlo. Esa enfermedad puede parecer grande, pero cuando Dios libera un torrente de sanidad, no tendrá la más mínima oportunidad.
Sus opositores podrían ser más fuertes, mejor financiados y mejor equipados, pero cuando Dios abre las compuertas, ellos no podrán comparársele.
Dios es un Dios De Imposibles, El hace todo perfecto, claro está, que los seres humanos comenzamos a desesperarnos, cuando algo no esta tomando el rumbo correcto, pero eso que para nosotros puede ser un gran problema que nunca se va acabar; Dios en milésimas de Segundo puede hacer uffff, cosas que no está a nuestro alcance pero si en el alcance divino.