“¡Arrepentíos, porque el Reino de Dios se ha acercado!” (Mat_3: 2)
Después de 400 años de silencio desde el cielo, un hombre es enviado por Dios con un mensaje. Su nombre era Juan y lo llamaron el Bautista. Su mensaje fue singular: “¡Arrepentíos, porque el Reino de Dios se ha acercado!” Así comienza el Nuevo Testamento.
Estas palabras no fueron dichas con un gruñido, como vemos en muchos rostros cansados y enojados del púlpito en estos días. ¡No! El mensaje de Juan estaba lleno de esperanza y asombro. Cuando dijo la palabra arrepentirse, no fue una reprimenda, sino una invitación. Una invitación extendida por Dios mismo, ofreciendo a sus hijos e hijas caídos y cautivos una salida de la oscuridad.
La palabra significa “cambiar”.
Significa el cambio de una cosa a otra. En este caso, es el alejarse de la esclavitud del pecado hacia la libertad del reino de Cristo. Por eso Juan dice: “¡porque el reino de Dios se ha acercado!” En otras palabras, puedes volverte del pecado a Dios porque Su autoridad gobernante ahora ha superado todos los demás reclamos sobre tu alma.
No hay título, ni escritura, ni ningún documento de autorización agarrado en manos codiciosas, que supere el poder inquebrantable del decreto del Señor de que eres libre.
Y libre eres, a pesar de todas las mentiras en sentido contrario. Ahora bien, es posible que no esté caminando en su libertad; pero eso no significa que no sea tuyo. Solo significa que necesitas arrepentirte, es decir, necesitas cambiar. Ahora puede hacerlo porque el poder de Dios está presente para ayudarlo.
Así como la luz es inconmensurablemente más grande que las tinieblas, Jesús es mucho más grande que el príncipe de las tinieblas. Y Su Reino es superior en todos los sentidos al reino de las tinieblas. No hay ley de ese mundo oscuro que ahora pueda hacer otra cosa que marchitarse como una mala hierba en el resplandor del poder gobernante real de Cristo.
Ahora bien, ¿qué harás hoy en la Tierra? Qué buena acción puedes hacer que demuestre el poder actual del gobierno de Cristo en tu corazón. ¿Qué posición puedes tomar que muestre abiertamente la derrota del diablo y la debilidad fulminante de su reino inicuo?
¡Oh, demuéstrale hoy a un mundo que mira que el Reino de Dios está cerca! ¡Y tu vida también será noticia en el cielo!
Pr. Jorge Escobar
