Vivimos tiempos difíciles y decisivos en la historia de la humanidad. Las señales y los diferentes sucesos en el mundo deben llevarnos a predicar el evangelio de Jesús.
Las personas en el mundo necesitan que todos los creyentes les compartamos el mensaje de salvación. Sino lo hacemos nosotros, ¿Quién lo hará?
Llevar el evangelio, es obedecer a Jesús.