Hay un texto muy hermoso que se lee en La Carta a Los Filipenses, cap. 1: 6
“Estoy persuadido de que el que comenzó en ustedes la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo.”
Persuadir significa convencer por completo.
El mismo texto de Filipenses en la traducción MSG dice:
“Nunca ha habido la menor duda en mi mente de que el Dios que comenzó esta gran obra en ustedes la mantendría y la llevaría a un final floreciente el mismo día en que Cristo Jesús aparezca.”
Es normal que las dudas asalten nuestros pensamientos, y que vacilemos, ya sea en la toma de decisiones, o que nuestra fe tambalee en momentos específicos.
Pero de algo, sí tenemos que estar completamente convencidos, Dios ha iniciado una obra maravillosa en nosotros desde el momento en que le entregamos nuestra vida a Jesucristo.
La Buena Semilla fue sembrada en nuestro corazón y desde ese instante algo maravilloso comenzó a gestarse en nuestro interior.
Claro que el crecimiento de esa semilla lo determinan varios factores:
Depende del esmero que pongamos en cuidarla. Debemos regarla con el Agua Viva de La Palabra del Señor, abonarla con oración, y exponerla a la Luz radiante de Su presencia.
Esa es nuestra labor, pero el crecimiento sobrenatural es obra de DIOS.
Recordemos que la obra de Dios en nuestra vida es como una planta (nace a través de una semilla, esta germina, crece, se desarrolla, florece y da frutos; los frutos crecen y maduran y viene el tiempo de la cosecha).
¿Tienes tú la certeza de que DIOS está haciendo cosas maravillosas en tu vida, aunque por ahora no mires el fruto?
Si aún albergas dudas sobre eso, hoy por medio de Su Palabra, El Señor te confirma que Él ya comenzó la más maravillosa obra en ti, y que se mantendrá trabajando en perfeccionarte (o sea en llevarte a la madurez) para que tengas un final floreciente. Dios nunca dejará de pulirte, nunca dejará de trabajar en ti porque eres su obra más hermosa y más amada.
Descansa en saber que todo cuanto estás viviendo te va transformando en un ser más hermoso.
Dios te bendiga.
