Querido amigo, no te dejes influir por ese mal ejemplo. Imita solamente lo bueno. Recuerda que los que hacen lo bueno demuestran que son hijos de Dios, y los que hacen lo malo demuestran que no conocen a Dios.
Uno de los cortesanos sugirió:
—Conozco a un muchacho que sabe tocar el arpa. Es valiente, hábil guerrero, sabe expresarse y es de buena presencia. Además, el SEÑOR está con él. Su padre es Isaí, el de Belén. 1 De Samuel 16:18
1. SABE EJECUTAR…
No empleen un lenguaje grosero ni ofensivo. Que todo lo que digan sea bueno y útil, a fin de que sus palabras resulten de estímulo para quienes las oigan.
Dios nos ha dado a todos algo bueno para contribuir para que nuestra sociedad sea mejor. No nacimos sólo por accidente, tenemos un propósito grande.
Dios nos dio el privilegio de servir en la iglesia, de predicar, de compartir con otros las buenas noticias…
Prueben y vean que el Señor es bueno; ¡qué alegría para los que se refugian en él!
Pues el Señor es bueno. Su amor inagotable permanece para siempre, y su fidelidad continúa de generación en generación.
¡Den gracias al Señor, porque él es bueno! Su fiel amor perdura para siempre.
El Señor es bueno, un refugio seguro cuando llegan dificultades. Él está cerca de los que confían en él.
¡No! Oh pueblo, el Señor te ha dicho lo que es bueno, y lo que él exige de ti: que hagas lo que es correcto, que ames la compasión y que camines humildemente con tu Dios.
Los ojos del Señor están sobre los que hacen lo bueno, y sus oídos están abiertos a sus oraciones. Pero el Señor aparta su rostro de los que hacen lo malo.