“¡El que quiere hacer algo, encuentra el camino! ¡El que no quiere hacer nada, encuentra una excusa!” Anónimo
Hoy quiero compartir acerca de las excusas o mentiras que nos decimos para no alcanzar el éxito en las relaciones, en el matrimonio, en el trabajo,…
Un caballero caminaba por un campamento de elefantes y vio que los elefantes no estaban en jaulas ni con cadenas. Todo lo que les impedía escapar del campamento era un pequeño trozo de cuerda atado a una de sus piernas.
Mientras el hombre miraba a…
Nosotros, que hemos ido hacia Dios para salvar nuestra vida, tenemos todos los motivos para agarrar la esperanza prometida con ambas manos y no soltarla nunca. Es un ancla espiritual irrompible, que llega más allá de todas las apariencias hasta la misma presencia…
No hemos hecho nada para merecer el amor de Dios. Su gracia nos permite tener salvación, que, a pesar de ser malos, Dios nos justifica por medio del sacrificio de Jesús. ¿Por qué a mí? Por su amor inagotable.
¿Cómo te sientes cuando observas tu pasado?
Es mejor no mirar atrás, traer a memoria acontecimientos que nos provocan dolor o pena solo nos encapsulan en una burbuja que nos mantiene presos del pasado.
Si tus pensamientos te dirigen al pasado, direcciónalos hacia el hoy, el Señor…
En todas partes del mundo se dice que el mejor amigo del hombre es un perro. ¿Por qué amamos a nuestros perros? Los amamos porque no pensamos en todo lo mal que se portan en algunas ocasiones. Lo mismo sucede con Dios, nos…
Si has llegado a los últimos años de tu vida, no te sumerjas en la depresión. Alégrate por lo vivido y por lo que todavía puedes dar. Las cosas dependen del modo en que las percibimos.
La vejez es como una cuenta…
En Cristo hemos sido perfeccionados ante los ojos del Padre. Dios no nos mejora, él nos perfecciona, no incrementa: Nos completa!
El único desastre final que puede acontecernos, es sentirnos como en casa en esta tierra. Mientras seamos extranjeros no podemos olvidar nuestra verdadera nacionalidad celestial.
Podemos hacer muchas cosas para sentirnos seguros, mejorar los sistemas de seguridad en nuestra casa, poner ventanas anti-impacto para protegernos del clima y sentirnos resguardados en nuestro hogar, pero no hay como refugiarnos en Dios. Allí sí que tenemos garantizada nuestra vida.
El temor del Señor…