Miren, los envío como ovejas en medio de lobos. Por lo tanto, sean astutos como serpientes e inofensivos como palomas.
A Dios le encanta darnos sabiduría, pero no la reparte a discreción, sino que se la da específicamente a quienes se la piden. Encontramos dos ejemplos de esto en la Biblia, ellos son Salomón y Pablo. Salomón deseaba sabiduría para poder liderar al…