Les daré un corazón nuevo y pondré un espíritu nuevo dentro de ustedes. Les quitaré ese terco corazón de piedra y les daré un corazón tierno y receptivo.
“Crea en mí, oh Dios, un corazón limpio, Y renueva un espíritu recto dentro de mí” (Salmos 51:10).
En estos últimos días he meditado mucho acerca del corazón. Recuerdo mucho que cuando de pequeño me regañaban o me hacían sentir mal, experimentaba una sensación,…