El estrés, preocupación y depresión están íntimamente relacionados, porque el uno puede desencadenar al otro y generalmente los pensamientos negativos nos conducen a estas situaciones.
La ansiedad no es tan simple como parece porque a menudo se malinterpreta simplemente con estar demasiado estresado.
Dicho esto,…
Y el testimonio es este: que Dios nos ha dado vida eterna, y esta vida está en Su Hijo.