Dios es tan rico en gracia y bondad que compró nuestra libertad con la sangre de su Hijo y perdonó nuestros pecados.
Los que viven al amparo del Altísimo encontrarán descanso a la sombra del Todopoderoso.
Y estoy seguro de que Dios, quien comenzó la buena obra en ustedes, la continuará hasta que quede completamente terminada el día que Cristo Jesús vuelva.
Entonces dijo a la multitud: Si alguno de ustedes quiere ser mi seguidor, tiene que abandonar su propia manera de vivir, tomar su cruz cada día y seguirme.
Como el ciervo anhela las corrientes de las aguas, así te anhelo a ti, oh Dios.
Pues todo lo puedo hacer por medio de Cristo, quien me da las fuerzas.
Miren, los envío como ovejas en medio de lobos. Por lo tanto, sean astutos como serpientes e inofensivos como palomas.
No me expulses de tu presencia y no me quites tu Espíritu Santo.
Por eso dice el Señor: «Vuélvanse a mí ahora, mientras haya tiempo; entréguenme su corazón. Acérquense con ayuno, llanto y luto.
y conocerán la verdad, y la verdad los hará libres.