Encontramos en el primer libro de Samuel 3:1-19 que:
*Por aquellos días no era muy común escuchar la palabra.
*Y que el joven llamado Samuel dormía en el santuario, no nos da más detalles, si era o no el joven más santo o capacitado. Pero si el escogido por Dios, santificado por su madre y guiado por el camino de verdad.
Luego, Jehová llama (busca) a Samuel y el responde:
¡HEME AQUÍ! (aquí estoy) pero Samuel no reconocía la voz del que le llamaba.
La biblia desde Génesis hasta Apocalipsis, encontramos que Dios busca o llama, habla y escucha (está presente).
Qué tal si te preguntas lo siguiente: ¿Me está llamando Dios? ¿Me estará buscando? ¿Escucho su voz o la estoy ignorando? ¿Cómo puedo tener una relación con Dios?
Es importante entender que no es como un club o trabajo con rutinas y leyes, sino que se trata de una de experiencia en el Señor. Así que experimenta el amor de Dios, siéntete amado y perdonado. Juan 15:9 / 1 Juan 4:10.
Luego, te recomiendo soltar el peso que NO PUEDES LLEVAR (hebreos 12) quizá, sean amistades tóxicas, juegos, actividades que te corrompen, etc.
– Corresponde a su amor y su paz, su perdón, su fuerza y su gracia.
– Dedica tiempo, disciplina y constancia en tu relación con Dios, que al final es la mejor pareja, de viajes, en los momentos malos o buenos.
– Dediquemos tiempo a aquel que pasa con nosotros 24/7 y que espera que le respondas y que lo ames. Deuteronomio 6:5
“Nos regala 365 o 366 días al año, cada día tiene 24horas y 86,400 segundos,12 meses. ¿Qué tiempo le damos nosotros para orar, escudriñar su palabra y ponerla en práctica?
Salomón descubrió que el conocimiento, por sí mismo, es vano (Eclesiastés 1:12-18). Encontró que el placer y la riqueza son vanas, el materialismo es vanidad, y las riquezas son efímeras.
Salomón concluyó que la vida es regalo de Dios y que la única manera sabia de vivir es temiendo a Dios: “El fin de todo el discurso es este: Teme a Dios, y guarda Sus mandamientos; porque esto es el todo del hombre. Porque Dios traerá toda obra a juicio, juntamente con toda cosa encubierta, sea buena o sea mala”.
Inicia o fortalece tu relación con Dios, y recuerda que todo el tiempo DIOS TE AMA.
¡Dios te bendiga! Att. Kike Sánchez