“Y para que la grandeza de las revelaciones no me exaltase desmedidamente, me fue dado un aguijón en mi carne, un mensajero de Satanás que me abofetee, para que no me enaltezca sobremanera; respecto a lo cual tres veces he rogado al Señor, que lo quite de mí. Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana me gloriaré más bien en mis debilidades, para que repose sobre mí el poder de Cristo”.
2 Corintios 12: 7-9
Hay una cosa que tenemos que tener bien claro, y es el hecho de que para Dios no hay nada imposible, pero hay cosas que Dios las pudiera hacer, pero no las hace porque sabe que de esa manera mantendremos la sintonía con Él y los pies sobre la tierra.
El Apóstol Pablo nos podría dar cátedra sobre esto, y es que a él le fue dado un aguijón en su carne que lo abofeteaba para que no se enalteciera en gran manera (como lo leímos al inicio) y a pesar que el mismo Pablo había orado y rogado al Señor para que se lo quitase, Dios no lo hacía.
A ninguno de nosotros nos gusta que Dios nos diga NO cuando estamos pidiendo algo, pues el mismo hecho de pedir lleva la intención de recibir lo que estamos solicitando, pero hay momentos en que Dios no querrá hacer aquello que nosotros le estamos pidiendo, ¿Será que no tiene el poder para hacerlo?, ni pensarlo, para él no hay nada imposible, es simple y sencillamente que NO QUIERE HACERLO porque Él quiere enseñarte algo más valioso que esa respuesta y es SU GRACIA.
No le reclames a Dios del porque no te contesta esa petición, en lugar de reclamar disfruta de la GRACIA que Dios ha derramado sobre tu vida.
Dios actúa de una forma correcta, Él conoce cada uno de tus anhelos y sabe que darte y que no darte, porque Él sabe lo mejor para nosotros.
Agradezcamos a Dios en TODO, deleitémonos en Él y sobre todo CONFIEMOS plenamente que sus respuestas sean un SÍ o un NO siempre son PERFECTAS, gocémonos en su GRACIA incomparable y tengamos la convicción y certeza que su PODER se perfecciona en nuestra vida.
¡Las Respuestas de Dios son Perfectas!
Adolfo Pineda