El SEÑOR te guiará permanentemente,
dará satisfacción a tus necesidades
cuando estés en tierras resecas,
y fortalecerá tus huesos.
Serás como un jardín,
como manantial de agua que nunca se seca.
“La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos ustedes. ¡Amén!" (2 Corintios_13: 14)
Tú y yo fuimos creados para experimentar la Presencia de Dios. Desde el principio, cuando la Voz de Dios caminó con…