¿Te ha sucedido que te despiertas y automáticamente tu mente reproduce una canción o algo así?
Pues hoy desperté y mi mente repite insistentemente:
¡TE SACIARÉ DE LARGA VIDA Y TE MOSTRARÉ MI SALVACIÓN!
es impresionante porque, es como si Dios quisiera esculpir esa convicción dentro de mí. (dejarla bien grabada en mis pensamientos).
He leído ese pasaje de las escrituras tantísimas veces, sin que llegase a tener la resonancia que hoy ha tenido.
Y pensándolo bien, representa tanto, que quise compartirlo con ustedes.
Realmente mis amigos y amigas:
El deseo del Padre es Saciarnos
Saciar, vienen del latín satiare y significa: dar lo suficiente, satisfacer, regalarnos plenitud) [Se relaciona con “satura” =una raíz etimológica que hacía alusión a un plato de ensalada que llevaba de todo y que dejaba satisfecho a quien lo comía].
El término en hebreo es sabá: tener abundancia, colmar, hastiar, -se, llenar, lleno, , -se, saciar, -se, satisfecho.
Nuestro DIOS no es escaso, cuando nos entrega sus bendiciones lo hace con una medida rebosante (el mismo salmo 91 dice unges mi cabeza con aceite, mi copra está rebozando de tus bendiciones).
Salvación (salvare = librar de peligro, mantener entero, sano, preservar).
Aquí el término hebrero para Salvación no es otro que la palabra YESHUA el Nombre que está sobre todo nombre, ante el cual toda rodilla se dobla en los cielos en la tierra y debajo de la tierra…para gloria de DIOS PADRE.
Yeshua significa: liberación, prosperidad, salvación, salvador, salvar, triunfo, victoria.
Esa es la autoridad que se encierra en el Nombre de nuestro SEÑOR Y SALVADOR.
Hay una versión muy hermosa de La Escritura (El Mensaje) que dice del Salmo 91:16
“Si te aferras a mí por tu querida vida”, dice Dios,
“Te sacaré de cualquier apuro.
Te daré el mejor de los cuidados.
si solo llegaras a conocerme y confiar en mí.
Llámame y te responderé, estaré a tu lado en los malos momentos;
Te rescataré y luego te haré una fiesta.
te daré larga vida,
¡te daré un largo trago de salvación!”
Al conocer el significado de la voluntad de DIOS para nuestra vida, necesariamente nuestra manera de pensar debe cambiar.
Y es así que podemos comprobar que sus planes para nosotros siempre son buenos, agradables y perfectos.
No cabe duda que al mostrarnos a JESÚS, EL PADRE nos ha saciado de vida plena (vida eterna) a través de su salvación.
