Cuando hablamos de estar enfocados, es poder evitar cualquiera distracción por la cual podemos perder el propósito a seguir. Poniendo atención al desarrollo del objetivo determinado.
El enfoque determina el rumbo a seguir, y estar enfocados es la capacidad de lograr las metas y los objetivos.
Recuerdo que en una ocasión me subí a un autobús equivocado, yo me dirigía al norte del país y sin darme cuenta tomé el autobús que se dirigía al sur. Ahora que lo pienso, creo que esto pasó porque no me concentré, no leí el rotulo del autobús, simplemente me subí y cuadras después tuve que bajarme (que pena verdad).
¿Cuántas veces nos pasa que, por querer hacer todo al mismo tiempo, perdemos el foco de nuestras prioridades? ¿A quién no le ha pasado que no le da tiempo de hacer algo, que era necesario, por distraerse en otras pequeñas cosas? O como a mí, me distraje y no me fije hacia donde me dirigía.
Lo que me sucedió con esta experiencia me hizo darme cuenta de lo importante que es mantener nuestro enfoque en lo que queremos lograr, hacer o alcanzar, y los pasos que nos llevaran a cumplir ese objetivo, mantener el foco claro en nuestras prioridades nos hará caminar seguros a la meta.
Para no perdernos o desviarnos de nuestros sueños y que se hagan realidad, es necesario enfocarnos, repite conmigo: enfocarme, enfocarme. Es indispensable concentrarnos y definir qué cosas son prioridad y que no, destinar cierto tiempo para las actividades del trabajo, la familia, pareja, proyectos, descanso, etc.
En Efesios 5:16 hay un gran consejo: Aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.
Mantengamos el enfoque para lograr los objetivos, persevera y alcanzarás dicen por ahí.
Saludos, que estén bien y que Dios les bendiga. Kike Sánchez