Que las palabras de mi boca y la meditación de mi corazón sean de tu agrado, oh Señor, mi roca y mi redentor.
El Señor es mi roca, mi fortaleza y mi salvador; mi Dios es mi roca, en quien encuentro protección. Él es mi escudo, el poder que me salva y mi lugar seguro.
El SEÑOR es mi roca, mi fortaleza y mi salvador;
mi Dios es mi roca, en quien encuentro protección.
Él es mi escudo, el poder que me salva
y mi lugar seguro.
Confíen siempre en el Señor, porque el Señor Dios es la Roca eterna.
"Dejó su manto en la mano de ella, y huyó, y lo sacó". — Genesis_39:12
Al luchar con ciertos pecados, no queda otro modo de victoria que el de la huida. Los antiguos naturalistas escribieron mucho sobre los basiliscos, cuyos ojos fascinaban a sus…
No pienses que no pasa nada, simplemente, porque no ves tu crecimiento, o no escuchas el zumbido de los motores.
Las grandes cosas crecen en silencio.
Proverbios 10:9 “Las personas con integridad caminan seguras, pero las que toman caminos torcidos tropezarán y caerán.”
Para quienes dependemos…
“No se preocupen por el día de mañana, porque mañana habrá tiempo para preocuparse. Cada día tiene bastante con sus propios problemas. Mateo 6:34”
Hay dos días preciosos en la semana en los cuales, y por los cuales nunca me preocupo, dos días despreocupados…
El Señor es mi roca, mi fortaleza y mi salvador; mi Dios es mi roca, en quien encuentro protección. Él es mi escudo, el poder que me salva y mi lugar seguro.
No tengan ningún temor. ¿Acaso no he proclamado yo desde épocas antiguas que los salvaría? Ustedes son mis testigos.
¿Hay acaso algún otro Dios? ¡No! ¡Ninguno que yo sepa! ¡No hay ninguna otra Roca!
Sé tú mi roca de seguridad,
donde siempre pueda esconderme.
Da la orden de salvarme,
porque tú eres mi roca y mi fortaleza.